HISTORIA DE QUITO PARA VIAJAR
«Quito, capital ecuatoriana, capital de todos y de todas, ciudad milenaria, referente unitario de la nación ecuatoriana… ¡Cómo nos llena de orgullo nombrarte, sentirte nuestra!«





Hoy vamos a hablar sobre la historia de Quito. Se trata de una ciudad fascinante, y es la puerta de entrada a cualquier viaje a Ecuador. Por ello, y como siempre os digo, es fundamental que sepamos un poco más sobre su historia antes de empezar a visitarla. De esta manera nuestro viaje tendrá mucho más sentido y entenderemos el contexto que todo lo que visitamos.
Cuando hablamos de historia, muchas veces nuestra mentalidad euro centrista nos juega malas pasadas, y tendemos a analizar la historia desde el momento en que los europeítos entramos en escena. En el caso de Sudamérica esto se ve muy claro, relacionado por supuesto con la colonización española del sur del continente. Sin embargo, se trata de una tierra muy antigua, donde antes de nuestra llegada ya habitaban pueblos y civilizaciones milenarias. En este contexto, Quito no es una excepción.
Orígenes de la historia de Quito
Se han encontrado restos de asentamientos humanos con más de 12.000 años de antigüedad, pueblos neolíticos que empezaron a poblar la gran cordillera andina y sus valles. Sin embargo, no hay que entenderlo como una ciudad primigenia, sino que, durante todo este tiempo, de manera no continua, se han podido documentar pequeños asentamientos en diferentes zonas. Es muy posible que todo este movimiento y esta falta de estabilidad se debiera, en parte, a la fuerte actividad volcánica de la zona. Nos encontramos en medio de la cordillera andina, en la llamada Avenida de los Volcanes, un lugar donde, históricamente, ha habido multitud de erupciones volcánicas. Por ello, no es de extrañar, viendo el mapa siguiente, que los pueblos no durarán mucho tiempo:



El reino de Quito y el imperio Inca
Avanzamos en el tiempo y nos encontramos con un elemento muy curioso en la historia de Quito, el llamado Reino de Quito. Según las crónicas de Juan de Velasco, la etnia de los quitus fundó una proto-ciudad de lo que más tarde sería la actual ciudad de Quito. Más tarde, esta misma ciudad sería conquistada y asimilada por otra etnia, las caras, quien conservarían el nombre de la ciudad. Según estas crónicas, este centro político uniría más tarde con otras etnias de la región para formar una gran unidad con tal de defenderse de los Incas. Sin embargo, no existe ninguna evidencia de ningún Reino de Quito, y los arqueólogos e historiadores así lo han corroborado.



Si que es cierto que las diferentes culturas que habitaban el valle de Quito tuvieron contactos comerciales y seguramente también políticos, pero en no hay ninguna evidencia de una unidad política de este tipo.
Lo cierto, es que los incas se establecieron en la región y, además, le dieron una gran importancia. Nos encontramos a mitad del siglo XV d.C, cuando los incas emprenderían, desde Cuzco, las campañas militares que los llevarían a controlar toda el área andina central, incluyendo el territorio en el que hoy se asienta la ciudad de Quito. Además, este territorio en concreto tuvo mucha importancia para ellos, sobre todo por la gran capacidad agrícola que había en esta zona de los Andes. Como curiosidad, y como veremos más adelante, el templo incaico se construyó en la que hoy en día es la plaza y la iglesia de San Francisco, cuyos restos utilizaron los españoles para levantarla.
Fundación de la ciudad Quito actual
No es ninguna sorpresa, aunque no es el tema del artículo de hoy, que la colonización española tuvo un impacto enorme en toda América, incluida esta región de Ecuador. Pero como siempre, no todo es como parece. No debemos pensar en una conquista unificada, por parte de un gobierno / estado como lo que aún pasa, por desgracia, en nuestros días. La conquista de América se desarrolló desde diferentes frentes y por parte de personalidades muy distintas.
Diferentes conquistadores, cada uno con su ambición, fueron repartiéndose el territorio latinoamericano, lo que nos lleva, en nuestro caso, a unos personajes muy concretos: Pedro de Alvarado, Diego de Almagro y Sebastián de Benalcázar.






Antes de continuar, creo que es importante entender el contexto en el que nos encontramos: Estamos a mitad del siglo XVI. A la llegada de los españoles a Sudamérica, el imperio inca se encontraba en plena guerra civil, una lucha de poder entre dos hermanos, Atahualpa, que había establecido su base en el actual Quito; y Huáscar, desde Cuzco. Ese mismo año, tras la victoria, Atahualpa accedió a reunirse con Francisco Pizarro, quien finalmente lo capturó y ejecutó.
La conquista de los andes fue motivada en gran medida por el rumor de que en Quito se encontraba el llamado Tesoro de Atahualpa. Por ello, se formaron dos expediciones, una desde Guatemala, dirigida por Pedo de Alvarado; y otra desde sur, dirigida por Sebastián de Benalcázar. Aunque se da por vencedor a Sebastián Benalcázar que fue quien llegó primero, lo cierto es que fue Diego de Almagro quien, para adelantarse a Alvarado, fundó la ciudad “a distancia”, desde la provincia de Chimborazo, estableciendo los documentos legales del cabildo antes de su llegada.
Así, oficialmente la ciudad fue fundada el 6 de diciembre. Cabe también destacar que su construcción se hizo sobre los pocos restos que quedaban del recinto prehispánico. El general inca Rumiñahui, días antes de la llegada de los españoles, quemó la ciudad por completo para que los conquistadores no encontraran nada al llegar.



Se establecieron así unos 200 hombres en la primigenia ciudad de Quito. Sigamos
Independencia de Ecuador en la historia de Quito



Los siguientes años estarán marcados por una consolidación del dominio español en la zona, así por la extensión de la ciudad en tamaño. A partir del siglo XVII será cuando la ciudad empezará a construir algunos de las iglesias que la definen como la Iglesia de San Francisco, la Iglesia de la Compañía o la Catedral metropolitana, entre otros. Si os interesa os recomiendo que paséis por el artículo sobre las iglesias de Quito donde hablo de ellas con más profundidad.
Por supuesto, el siglo XIX estará marcado por los movimientos independentistas que recorrieron toda América latina, incluido por supuesto el Ecuador, quien finalmente iniciaría su proceso el 10 de agosto de 1809, aunque en esta primera etapa el territorio formaría parte del supra -estado conocido como la Gran Colombia. Será en mayo de 1830 cuando se separaría de la misma formando ya un estado independiente en forma de República.
No me voy a extender más aquí. En adelante la historia de Quito iría ligada a la de Ecuador, con un siglo XX caracterizado por las dictaduras y las guerras con Perú, y un siglo XXI por la irrupción política, a principios del milenio, de Rafael Correa.
Hoy en día Quito es una ciudad cosmopolita, un lugar ideal donde iniciar el viaje a Ecuador. En sus calles no solo se puede apreciar el pasado colonial de país, sino también algo mucho más importante: su multiculturalidad. Ecuador tiene reconocidas oficialmente 14 nacionalidades dentro de su territorio. Cada una de ellas, aunque compartan rasgos en común, tienen sus propias singularidades, su propia manera de ver el mundo. Esta es una de las mayores riquezas de este país.
En el siguiente artículo hablaremos sobre QUE VER EN QUITO, una exploración más a fondo sobre los principales puntos de interés de la ciudad. ¡Si estáis pensando en un VIAJE A ECUADOR no os lo podéis perder!


